¿QUÉ ES LA MEDICINA CUÁNTICA?

 

La palabra Cuántica significa “unidad” y actúa sobre el cuerpo y la mente. Con la menor fármaco dependencia y en la menor cantidad de tiempo, devuelve la salud y el bienestar, pero fundamentalmente la libertad y autonomía, respetando por sobre todo la condición de cada uno de los pacientes a tratar y sus limitaciones. Desde el punto de vista de la Medicina Cuántica, podemos afirmar que la enfermedad aparece en un individuo, cuando un organismo pierde la capacidad de mantener sus funciones en forma ordenada y armónica. Esta enfermedad o desorden puede manifestarse en cualquier tejido u órgano, por esto es que cada persona desarrolla una enfermedad distinta y con los síntomas particulares que cada individuo es capaz de manifestar. Mantener este desorden, hará que la enfermedad avance o persista; corregirlo en cambio, hará que la enfermedad desaparezca totalmente.

Hace noventa años, Einstein descubrió que el átomo, ese mínimo elemento, atesora conceptos y variaciones de formas y estructuras, insospechados hasta ese momento. Una vez al año todos los átomos de nuestro cuerpo se renuevan en un 98%. Las energías externas interactúan con las energías internas tanto fisiológica como emocionalmente, es decir, constantemente en cada persona ocurre un silencioso intercambio de cantidades de energía que pueden ser absorbidas o emitidas.

La Medicina Cuántica es la ciencia de la conciencia y sus técnicas están diseñadas para unificar el núcleo del sistema cuerpo-mente.  En ese núcleo se inicia el proceso de curación y para alcanzarlo hay que traspasar los niveles más elementales del cuerpo, es decir, células, tejidos u órganos, hasta llegar al punto de encaje entre materia y mente.
El doctor o terapeuta debe reconocer las resonancias patológicas de cada enfermedad y realizar una aplicación adecuada de fotones (partícula portadora de todas las formas de radiación electromagnética, incluyendo los rayos gama, rayos X, la luz ultravioleta, la luz visible, la luz infrarroja, las microondas y las ondas de radio).  Con ello todas las células se unifican en un mismo eje de vibración, lo que permite a toda la estructura física resonar armónicamente como si fuese una totalidad unificada.